El acto de comunicar es un proceso complejo en el que se involucran dos personas a través de un intercambio de mensajes con códigos similares. Mientras esto sucede, tratan de comprenderse e influirse de forma que sus objetivos sean comprendidos, utilizando un canal que actúa de estructura en la transmisión de la información. Por lo tanto, la comunicación constituye una característica y una necesidad de las personas y de las sociedades con el objetivo de poder intercambiarse informaciones y relacionarse entre sí.

Durante los días lunes y martes de esta semana, se realizó un taller de Comunicación Asertiva dictado por la coach Yolanda Martínez, bióloga de profesión, que se dedica a la gestión emocional hace 8 años a través de la unión entre el ámbito empresarial y el de las habilidades blandas.

En la actividad participaron colaboradores de Constructora Madesal, Áridos Madesal, Empresas Madesal, Energía Circular e Inmobiliaria Madesal, quienes aprendieron acerca de las ventajas y beneficios para una comunicación asertiva, la cual sirve como un óptimo mecanismo para lograr objetivos de gran impacto.

La finalidad del taller fue aprender cómo decir lo que quiere sin herir al otro y de qué forma involucrar los valores de la empatía y comprensión tanto el ámbito laboral como personal, ya que al comunicar de manera efectiva se reducen errores y se instala la confianza óptima para crear mejores relaciones interpersonales.

De acuerdo con las palabras de Yolanda, la importancia de una comunicación asertiva en el mundo empresarial es crucial. “Nosotros somos personas, inminentemente somos emocionales por lo que el objetivo del trabajo viene bloqueado cuando uno se siente mal, no somos productivos. Por más que queramos transmitir información, si no estás viendo cómo está el otro o no chequeas lo que ha entendido, el resultado no es el mismo. Chequear la emoción ayuda a conseguir el objetivo”, comentó.

La comunicación tiene la capacidad de fortalecer el vínculo entre líderes y colaboradores, sin caer en el error de suponer que el otro ha entendido bien el mensaje transmitido. Las frustraciones y problemas cotidianos son parte del día a día que entorpecen el canal de comunicación, por lo que es crucial mejorar el trabajo colaborativo, preguntando a quien sea y las veces que sean necesarias para tener una conversación fluida y sin mal entendidos.